A errores, no nos ganan
Dice el dicho: “errar de humanos, corregir de sabios”. Es cierto que al mejor cazador se le puede ir la libre, pero de ahí que se cometan errores tan garrafales como en el Boletín Oficial del Estado, eso es otra cosa. Sabemos lo que son las prisas, las carreras y las presiones para que una cosa salga, lo que no se puede aceptar es que un decreto o una ley que se publica en el BOE, tenga fallas y luego tengan que corregir. Las personas que ahí están, o son muy torpes, o de plano son descuidados. Hasta ahora, nunca habíamos visto algo igual. No ocurre nada malo, pero si se publica algo que afecte a la ciudadanía y se aplique con las siguientes consecuencias, eso sí es grave. No sabemos a quién le hayan fincado responsabilidades por este caso, pero el castigo, si es que hay alguno, debería ser corrido de inmediato por no fijarse en algo tan fundamental. ¿O es que solo lo hace una persona? ¿No lo revisan varios para que no haya esas fallas? Señores burócratas de la administración, no por estar inmersos en la 4T se pueden dar el lujo de cometer tales errores para que el Tlatoani mayor los perdone. Hay que ser profesional, de lo contrario, renunciar si no se tiene la capacidad.
A los Bartlett se les acaba el aire
Después de tanta presión, la Secretaría de la Función Pública tuvo que hurgar para no caer en más descrédito de lo está. Pasa por alto muchas cosas de personajes que están muy vinculados a la 4T y otras que le debería dar carpetazo, porque nada aportan, sino nota periodística, le gusta ahondar para, o bien desprestigiar o de plano, hacerse notar. Después del gran escándalo de la venta de los ventiladores del hijo del director de la CFE, Sr. Bartlett, Irma Eréndira Sandoval nos dice que ha abierto siete líneas de investigación contra funcionarios y particulares como parte del avance de los procedimientos administrativos sancionadores por presuntas irregularidades en la adquisición de los veinte ventiladores en el IMSS en Hidalgo a la empresa de León Manuel Bartlett. En un comunicado se nos dice que ya se regresaron estos ventiladores al proveedor. Para colmo, ahora dicen que los dichosos ventiladores no cuentan con los requerimientos y características técnicas, según se había indicado en el contrato. Parece que a los Bartlett se les acabó el “aire. No sabemos al final como terminará la comedia. Pero no dudamos que la sanción sea tan insignificante, que todo quede en eso, nota de prensa y ahí se acabó todo. Es una pena. La tabla de medir no es lo mismo para unos que para otros. A los amigos se les perdona, a los “adversarios” se les castiga. ¿Dónde queda la justicia?
Covid-19 eterno
Según nos informan de la Organización Mundial de la Salud, el así llamado Covid-19 o comúnmente también conocido como “coronavirus”, nos está jugando “amor eterno”. Es decir, que vino para quedarse para siempre. Al final, como las influenzas estacionarias, solo que este parece que no tiene tiempo especial durante el año. En cualquier momento puede aparecer un brote por acá o por allá. Es más, ya lo comparan con el VIH sida. Solo que el sida se transmite por conducto sexual y el covid-19 por la boca con tos o estornudo. Hasta ahora para el sida no se ha encontrado cura, vacuna o algo que pueda o erradicar esa enfermedad. Claro que, los retrovirales, como así le llaman para paliar el sida, son caros y los laboratorios hacen su “agosto” con ello. ¿Pensarán hacer lo mismo con el Covid-19? Hasta ahora nos dicen que no hay vacuna que pueda evitar el contagio y que si la hubiera, tardaría en salir al mercado más de un año. Todo ello nos hace pensar y elucubrar en los intereses de las farmacéuticas y otros consorcios involucrados en las investigaciones médicas que solo buscan beneficiarse del mal ajeno. Si así fuere, es triste y lamentable. Además de ser una falta de ética. Algún día lo pagarán.
La avaricia siempre nos lleva delantera
De nuevo escuchamos las tristes noticias de personas que han muerto por adulterar productos, entre otros el alcohol. Se informaba que en Puebla van más de 40 muertos y algunos menos en Morelos. Así podríamos ir desgranando el rosario de muchas otras víctimas como los que murieron en el hospital de Pemex en Tabasco por suministrarles el medicamento que no les correspondía. La autoridad sale con la cantaleta de siempre, que se castigará a los culpables. Después que suceden los hechos, poco más sabemos si se castigaron o no. Mientras, los que murieron tuvieron que pagar el precio de los que lucraron con esta bebida adulterada y la vendieron como si fuera original. Ya no hablemos de ética y moral, porque los que hacen eso, dudamos que tengan corazón para hacer lo que hicieron. Unos buscando precios bajos, otros queriendo abusar y sacar ventaja con adulterar las bebidas. Es hora de aplicar la ley y castigar a los responsables con penas severas para que haya escarmiento y no se vuelvan a cometer atropellos con los que acabamos de mencionar. Familias destrozadas y sentimiento de impotencia ante lo poco que se puede esperar de la justicia.
