En la columna El Cenote Sagrado del 5 de junio de 2020: El decálogo de AMLO; El enojo de la gente; El BOA y el Frenaaa; Los comentarios del embajador Barranco
En la columna El Cenote Sagrado del 5 de junio de 2020: El decálogo de AMLO; El enojo de la gente; El BOA y el Frenaaa; Los comentarios del embajador Barranco

El decálogo de AMLO

Mucho ha dado de qué hablar el así llamado “Decálogo AMLO”. Diez recomendaciones de cara al desconfinamiento que nada tienen que ver con lo político y sí mucho, con una actitud personal de cara la situación que estamos viviendo con motivo de la pandemia del coronavirus. Si analizamos una por una de las recomendaciones, pareciera que estamos escuchando una charla de Desarrollo Humano. Llama la atención el número 10 de sus recomendaciones: “Seguir un ideal”, dice: “ Independientemente de la religión que se profese, que cada uno de los mexicanos busque “un camino de espiritualidad, un ideal, una utopía, un propósito en la vida, algo que te fortalezca y te mantenga activo y alegre”. No cabe la menor duda que estamos ante un hombre que, bien se puede decir y, después de haber recorrido todo el territorio nacional en más de una ocasión y de haber hablado  y escucha  miles de personas, sabe de verdad de lo que carece el mexicano. Si bien no estamos de acuerdo en casi nada de lo que viene haciendo el Presidente de la 4T, ahora tenemos que decir que le ha dado “en el clavo”. Será criticado y muchos han dicho que “lo dicho” no está a la altura de un político y que más bien parece un sermón de iglesia. Pues sí, será un sermón de Iglesia o lo que sea, pero la realidad no se puede ocultar con un dedo. México necesita un ideal, una utopía, un aliciente para salir adelante. El problema está en “el cómo” hacer eso y con qué herramientas y recursos contamos para llevar a cabo tal ideal. No dudamos de las buenas intenciones del Presidente. Pero como reza el dicho: “no es malo el rey, sino sus consejeros”. Con seguridad, muchos que le susurran al oído lo estén confundiendo con otras  ideas que nada tienen que ver con las buenas intenciones de AMLO.

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El enojo de la gente

No hay día que no despertemos con la noticia de alguna manifestación de personas en la plancha del Zócalo capitalino. Protestas por acá y protestas por allá. Hoy nos anunciaron del bloqueo en el Toreo de los transportistas del Estado de México.  Más de uno se preguntaba por qué tienen que manifestarse y obstruir las vías de acceso a la entrada de la ciudad. ¿No podrán resolver los problemas en su estado? Ese y otros eran los comentarios de más de un usuario que se vio afectado por el cierre de dichas vías. Los problemas que nos aquejan son muchos y aumentarán en el futuro. También es cierto que esta pandemia ha venido a sacar lo mejor y lo peor de nosotros. El encierro, la casi nula movilidad, en algunos lugares, hasta “toque de queda”, todo confluyendo para crear un clima de pesadumbre, de enojo, agresividad y todas las furias que el ser humano lleva dentro de sí. Las autoridades pareciera que miran a otro lado y solo cuando tienen el problema encima buscan soluciones o parches a la situación. Antaño todo se arreglaba con un “fajo” de billetes al líder de tal o cual corporación. Hoy, dicen que no se puede hacer eso en vista de la honestidad y del buen gobierno. No lo creemos tanto, pero le damos el “beneficio de la duda”. Lo que no se puede es seguir como estamos. Necesitamos que todos, hombres y mujeres nos pongamos a trabajar y como bien decía en su “Decálogo” nuestro Tlatoani, tener “un ideal, una utopía”, es decir, saber dónde queremos llegar. Para eso, no necesitamos discursos banales o doctrinas trasnochadas, sino que, todos, desde la base de la pirámide hasta la cúpula, nos entendamos y juntos trabajemos por un México más justo, menos racista, solidario y donde se respeten todos los derechos de los ciudadanos.

El BOA y el Frenaaa

Estos días nos hemos encontrado en los medios impresos y digitales con estos términos que nos llaman la atención. Primero que la “bao o boa”: bloque amplio opositor y el ya muy conocido FRENAA: frente amplio anti AMLO.  El conocido “Bloque Amplio Opositor”, curiosamente se dio a conocer en Palacio Nacional por el mismísimo Presidente. Unos dijeron que salió de ahí mismo que fue muy mal hecho. Claro, como muchos otros documentos que,  además de tener faltas de ortografía, ni tienen pies ni cabeza en su misma redacción. Pareciera que nuestros administrativos de Palacio les falta, además de ortografía, saber escribir bien y poner las ideas claras para que todos las entiendan. Es muy sospechoso que se diera a conocer en una de las mañaneras y de ahí “pal real”, ya casi no se supo nada del mismo. Los progenitores del mencionado documento ni siquiera han dado la cara, lo que aún, lo hace más sospechoso. Algunos se han atrevido a decir que fue un distractor con el fin de desviar la atención de alguno de los muchos problemas en los que está inmersa esta administración. En relación al FRENAA, ahí si se conocen los padres del mismo, encabezado por un potente empresario de Monterrey. Los ataques no se han hecho esperar por parte de los integrantes de la 4T a estos movimientos casi espontáneos de ciudadanos que no están de acuerdo con las políticas del actual gobierno. Lo triste de todo esto es que nuestros gobernantes actuales no les gusta que les critiquen y hacen todo lo posible para desacreditar tales críticas. Cuando eran oposición, expresaban con toda libertad lo que querían y decían, hoy se han vuelto radicales y les molesta que les digan lo que hacen mal. En una democracia deben caber todas las ideas. Los que están a favor y lo que están en contra de los que gobiernan. Lo que no se vale es difamar, calumniar y lo peor, intimidara con acciones violentas o administrativas para acallar toda crítica ciudadana.

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Los comentarios del embajador Barranco

En días pasados leíamos un comentario del Embajador  en el Vaticano en relación a las quejas de algunos “ilustres” ciudadanos de México que le han hecho llegar al Papa o, mejor dicho, que el mismo Papa los ha recibido escuchando tales comentarios. El Papa es libre de recibir y escuchar a quien él desee, pero de ahí que venga con chismes diciendo que algunos mexicanos vayan con él y se quejen del gobierno, eso nos parece muy atrevido por parte de nuestro Embajador. No dudamos que algunos que visiten Roma  la ciudad eterna, se encuentren con diferentes personajes de la Curia vaticana y estos comenten a su vez con el Papa tales comentarios. Pero de ahí a que el Papa se preste a estos tipos de comentarios de los que nos habla el Embajador, nos parece extraño y si nos obligan, diríamos, absurdo. Resulta curioso que esto salió justamente en los días que tuvo más efervescencia el tema antes mencionado: “BAO y FRENAA”.

Estamos seguros que si esto ha llegado a oídos del Papa, no le habrá  gustado mucho. Claro está que no hará mención la oficina de Prensa vaticana porque no merece la pena. Sin embargo, este tiempo de comentarios siempre crea confusión y se deberían cuidar mucho.