La reforma judicial de AMLO
No se han hecho esperar las críticas a esta reforma que pretende llevara a cabo nuestro Presidente de la 4T. Las voces de los especialistas y académicos dicen que el endurecimiento propuesto implica un retroceso que entraña violaciones a la Constitución y los Derechos Humanos. Las organizaciones civiles, se “rasgan las vestiduras” porque dicen que es un atropello a los derechos ciudadanos. Hay varios asuntos que están causando ámpulas en estos grupos conocedores del tema, como puede ser la “presunción de inocencia y la independencia del poder judicial”, la ampliación de los delitos que ameriten el arraigo del sospechoso, lo que significa retener a alguien mientras se recogen pruebas y se presente una acusación en su contra. Y justamente, estas propuestas podrían ir en contra de la misma Constitución. Ante tal oposición, nos vienen a decir que lo que se filtró es un borrador de la reforma y no la reforma como tal. ¡Menos mal! Siempre hay salidas “honrosas” para todo. El mismo Ricardo Monreal salió a decir que no irán contra los Derechos Humanos. En fin, mucha discordia ante este proyecto que parece que lo único que busca, es controlar y tener bien amarradas las riendas de las instituciones. Como ciudadanos debemos estar vigilantes y atentos para que no nos aten las manos y ser “vasallos” de un régimen que nos puede controlar a su antojo.
“Habemus” TMEC
Aunque falta todavía la aprobación del Congreso de Canadá, el escollo más difícil ya se libró. La Cámara de Representantes de EU aprobó por 89 votos a favor y 10 en contra el tan traído y llevado: TMEC. Unos dicen que es un triunfo del Sr. Trump porque puso de “rodillas” a México y de alguna manera a Canadá. Cuando estuvo en campaña, Trump prometió que se revisaría el Tratado de libre comercio con México y Canadá porque con él, EU estaba en desventaja y lo que sucedía era pérdida de empleos y aumentar el déficit con los países que se había firmado. Al fin logró y, después de unas arduas negociaciones, que México y Canadá cedieran en muchos rubros que no sabemos en un futuro cercano las consecuencias que esto tendrá para las economías de estos países. Mientras, nuestro Presidente de la 4T, echa las “campanas al vuelo” como un gran triunfo para México lo que significará certidumbre para los que quieran invertir en nuestro país. Claro que eso está por verse porque un gobierno que parece que no tiene rumbo y con una delincuencia desatada por todo el territorio nacional, no sabemos quien se atrevería a poner su dinero en semejantes circunstancias. Sea lo que sea, hoy podemos decir que se juntaron dos “opuestos”, ¿quién lo iba a decir? Salinas de Gortari inició el Tratado de Libre Comercio, AMLO lo renegocia y se aprueba, ambos enemigos acérrimos, pero cuando se trata de México, todos salimos ganando, como dice la Lotería Nacional.
Los festivales de la CDMX
No nos podemos quejar de las fiestas que organiza la Ciudad de México para todo aquel que quiera participar en ellas. Festivales por acá, festivales por allá. La cosa está en distraer lo más que se pueda para que no hablemos de los verdaderos problemas que nos aquejan. Claro está y, como diría Doña Chonita, “que todo depende del cristal con que se mire”. En cierto sentido tiene razón. Porque la gente necesita diversión y esparcimiento y tampoco se puede decir que los “festivales” organizados hayan estado faltos de gente. Las multitudes corren a divertirse, no sabemos si para olvidar las penas o para salir de su casa y evitar las broncas de cada día que con seguridad no son pocas. Los más críticos al gobierno dicen que lo que hacen es entretener al pueblo con “pan y circo”. Tal vez circo, pero “pan” no, porque este año, el Gobierno de la ciudad decidió eliminar la “mega rosca de Reyes”, muy concurrida en otras administraciones, pero con eso que todo lo anterior hay que borrarlo de la “faz de la tierra”, este año, los capitalinos nos quedamos sin “rosca” y nos alegraron con el “circo de las piñatas”. Al fin, todos contentos porque algo nos llevamos.
Venta de droga con dulces
¡Lo que nos faltaba! Nos sorprendía la noticia que a la salida de las escuelas había ciertos individuos que vendían dulces a los niños y niñas, pero que tenían droga. No terminamos de escuchar cosas asombrosas, no para bien, sino todo lo contrario. Esto parece un cuento sacado fuera de la realidad. La verdad que estos hombres y mujeres que llegan a hacer semejante barbaridad, no tienen corazón. Poner droga en un dulce, “merecería la horca” en una plaza pública como en tiempos de la Inquisición. Suena duro, pero venderle a unos inocentes niños caramelos con droga para crearles adición, no tiene perdón. La deshonestidad ha llegado a tal nivel que ya no importa nada con tal de ganar dinero de la manera que sea, aún destruyendo vidas inocentes. Las autoridades deben cumplir su misión de proteger a la ciudadanía, pero los padres de familia, deben estar muy atentos y estar cerca de sus hijos educándolos e informándoles de los peligros que corren cuando alguien se acerque a ellos ofreciéndoles productos sin saber su origen verdadero. Debemos cambiar nuestros hábitos y actitudes y ser más “abusados” que los que quieren “abusar” de nuestra buena voluntad.
