Un teologo de la Liberación en los altares

Este 24 de marzo de cumplen 43 años del asesinato de Monseñor Óscar Arnulfo Romero

¿Quién fue Mons. Oscar Arnulfo Romero y Galdámez?

Nació un 15 de agosto de 1917 en la Ciudad de Barrios, Departamento de San Miguel, en el oriente de la República de El Salvador.

Fue nombrado Arzobispo de San Salvador por el Papa Pablo VI en 1977.

Su gobierno pastoral destacó por la defensa de los derechos humanos, en medio de una naciente guerra civil entre la guerrilla de izquierda y el gobierno de extrema derecha.

Fue arzobispo de San Salvador durante tres años –a partir de 1977– hasta que fue asesinado el 24 de marzo de 1980, tenía 62 años de edad.

Durante esos tres años denunció reiteradamente la violencia y se pronunció a favor de las víctimas de la guerra civil. Defendió el derecho de los pobres a exigir un cambio político, una posición que lo convirtió en un adversario problemático para los gobernantes del país.

De hecho, un mes antes de su asesinato, Monseñor Romero le escribió una carta al presidente de EU, Jimmy Carter, instándolo a que dejara de apoyar al gobierno salvadoreño e interrumpiera su suministro de armas y asesores militares, y un día antes de su asesinato, exhortó a los soldados y policías a no seguir las órdenes de matar a civiles, y a que detuvieran la represión.

Sus últimas palabras, pronunciadas en la catedral de San Salvador, estuvieron dirigidas a los militares:

“Están matando a sus mismos hermanos campesinos. Ningún soldado tiene que obedecer la orden de matar. Ya es tiempo de que recuperen su conciencia. En nombre de Dios y en nombre de este sufrido pueblo, les suplico, les ruego, les ordeno, cese la represión”.

Un día después, a las 18 horas del 24 de marzo de 1980, mientras celebraba un servicio religioso en la capilla de la Divina Providencia en San Salvador, un francotirador –aparentemente un antiguo capitán de las fuerzas aéreas salvadoreñas, Álvaro Rafael Saravia– le disparó una bala expansiva que le destrozó el corazón y lo mató casi en el instante.

¡La repercusión internacional del magnicidio fue enorme! El asesinato de Romero marcó el inicio de un río de sangre que cubrió todo el territorio nacional. Y fueron altos mandos militares los principales responsables de asesinatos de líderes políticos y masacres de campesinos.

El crimen quedó impune durante mucho tiempo..

Años despúes fue elevado a la categoría de beato y luego Santo…

El proceso de beatificación fue largo y con muchos tropiezos tanto por las oposiciones respecto al pensamiento y a la acción pastoral del arzobispo como por la situación conflictiva que se había creado en torno a su figura.

Comenzó en marzo de 1994, 14 años después de su muerte. Juan Pablo II abrió el proceso de beatificación del prelado y, tras concluirse la fase diocesana que redactó el informe sobre su vida, en 1997 pasó a la Congregación de la Doctrina de la Fe para que diese su autorización.

En 2007, en su viaje hacia Brasil, Benedicto XVI dijo claramente que él consideraba a Romero digno de ser beatificado, pero el proceso no avanzaba. ¿Por qué?

Para algunos era oportuno tomar un poco de más tiempo, ya que según la figura de Romero beatificado podía convertirse en una bandera de la Teología de la Liberación.

Pero el camino a la santificación se desbloqueó mágicamente luego de la elección del papa Francisco, justamente en marzo de 2013.

El 3 de febrero de 2015, Francisco reconoció su martirio.

El Colegio de los Teólogos de la Congregación para las Causas de los Santos confirmó con voto unánime el martirio in odium fidei del arzobispo asesinado. Y para la canonización de un beato es decisivo reconocer un milagro por su intercesión, eso fue más rápido.

¿Cuál fue el milagro?

Una mujer embarazada, cuya vida estaba en peligro en el momento del parto, oró a Oscar Arnulfo Romero para que intercediera por ella y su hijo ante el supremo creador, y ambos sobrevivieron. No conocemos los nombres de las personas, pero muy pronto lo sabremos.

“Monseñor (Romero) intercedió y se salvaron los dos. Vamos a conocer su nombre y seguramente su historia completa. Tenemos eso en reserva, hoy se va a poder dar a conocer porque es un hecho maravilloso que fue analizado con muchísimo cuidado en Roma”, afirmó el cardenal Gregorio Rosa Chávez a los medios de El Salvador y llamó al arzobispo asesinado “San Romero del mundo”.

En octubre de 2018 fue elevado a la categoría de Santo…

Monseñor Romero fue declarado santo por el papa Francisco, quien resaltó su cercanía a los pobres

En una histórica ceremonia el papa Francisco canonizó al monseñor Óscar Arnulfo Romero, “conmovido por los sufrimientos de los más débiles denuncia el pecado social convirtiéndose en voz de los sin voz”.

Junto a Romero fueron canonizados: el papa Pablo VI, Francisco Spinelli, Vicente Romano, María Catalina Kasper, Nazaria Ignacia de Santa Teresa de Jesús March Mesa y Nuncio Sulprizio.