El Papa Francisco avala milagro del arzobispo asesinado.

El Papa Francisco autorizó los decretos relativos al milagro atribuido a la intercesión del beato Oscar Arnulfo Romero, el arzobispo que fue asesinado el 24 de marzo de 1980 por un escuadrón de la muerte cuando celebraba misa, con lo que se convertirá en el primer santo salvadoreño.

Según información de la Santa Sede, el Obispo de Roma recibió ayer en audiencia al cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos y dio curso a la petición.

Romero, un prelado comprometido con los pobres, fue beatificado en mayo de 2015 en una misa multitudinaria en San Salvador. La ceremonia fue oficiada precisamente por el cardenal Angelo Amato, enviado especial del Papa Francisco.

El homicidio ocurrió mientras Romero celebraba la comunión en la capilla de la Divina Providencia en San Salvador; un francotirador le disparó una bala expansiva que le destrozó el corazón y lo mató casi al instante. En su última homilía, el arzobispo había exigido al Ejército local desobedecer las órdenes de represión dadas por los jefes castrenses, además de solicitar al gobierno de Estados Unidos cesar el envío de ayuda militar al régimen imperante.

La causa de beatificación del salvadoreño comenzó en 1997, pero se encontraba congelada debido a que prevalecía la duda sobre si Romero había sido asesinado por una cuestión de odio religioso (in odium fidei) o por índoles políticas. De haber sido esto último, no se le podría haber declarado mártir de la fe.

El camino a la santificación de Romero se desbloqueó luego de la elección del Papa Francisco. En 2015, el Colegio de los Teólogos de la Congregación para las Causas de los Santos confirmó con voto unánime el martirio in odium fidei del arzobispo asesinado.

Aunque no se precisó la fecha para la ceremonia de canonización, se planteó la posibilidad de que se efectúe cuando el Papa viaje a Panamá para la Jornada Mundial de la Juventud, en enero de 2019, como lo anticipó el cardenal Gregorio Rosa Chávez, obispo auxiliar de San Salvador. Otra opción es que sea canonizado junto con el papa Pablo VI en Roma, luego del sínodo de obispos sobre los jóvenes, convocado del 3 al 28 de octubre próximos.

El milagro

Una mujer embarazada, cuya vida estaba en peligro en el momento del parto, oró a Oscar Arnulfo Romero para que intercediera por ella y su hijo ante el supremo creador y ambos sobrevivieron. Éste es el milagro atribuido al arzobispo salvadoreño.

“Monseñor intercedió y se salvaron los dos. Vamos a conocer su nombre y seguramente su historia completa. Tenemos eso en reserva, hoy se va a poder dar a conocer porque es un hecho maravilloso que fue analizado con muchísimo cuidado en Roma”, afirmó el cardenal Gregorio Rosa Chávez a los medios de El Salvador y llamó al arzobispo asesinado “San Romero del mundo”.

Asimismo, sostuvo que “hoy es un día grande para El Salvador… un día de gloria, de júbilo y de esperanza para nuestro país”.

Doce decretos más

Además de la elevación a los altares de Romero, el Papa Francisco autorizó a la congregación promulgar 12 decretos más que reconocen los milagros atribuidos a la intercesión de los beatos italianos Pablo VI, Francesco Spinelli y Vincenzo Romano; así como a las beatas María Katharina Kasper, de Alemania, y María Felicia Guggiari Echeverría (llamada también María Felicia del Santísimo Corazón de Jesús), de Paraguay.

Además, los decretos reconocen las virtudes heroicas del sacerdote polaco Bernard Lubieński, del fraile italiano Cecilio Maria Cortinovis, de las monjas italianas Giustina y Maria Schiapparoli, así como de María Antonella Bordoni y Alessandra Sabattini. Con esto, se abre el proceso de beatificación para estos religiosos.