En la primera versión había un párrafo difuminado y una parte oculta bajo libros.

Tras la polémica desatada por la difusión parcial de una carta de Benedicto XVI el lunes pasado, El Vaticano decidió publicar hoy la epístola íntegra del papa emérito.

La carta en cuestión había sido difundida en vísperas del quinto aniversario de pontificado del Papa Francisco por Dario Viganò, prefecto de la Secretaría de la Comunicación y máximo responsable del aparato comunicativo del Vaticano.

En ese momento también se dio a conocer una foto alterada de dicha epístola (lo cual fue reconocido por El Vaticano), con una párrafo desenfocado e ilegible y una parte tapada por una pila de libros, algo que sorprendió a los representantes de los medios de comunicación. Esto generó controversia e incluso acusaciones a la Secretaría de Comunicaciones de manipulación.

En los dos párrafos difundidos, Benedicto XVI defendía al Obispo de Roma, destacando “su profunda formación filosófica y teológica” pero, como trascendió luego y tal como había leído durante la presentación Viganò, el papa emérito también había dicho que no escribiría ningún comentario, como se le había pedido, porque no iba a poder leer una serie de 11 libros que recopilan La teología de Papa Francisco, editada por la Santa Sede, debido a otros compromisos.

El vaticanista Sandro Magister (crítico de Francisco) reveló en su blog que en la carta, Benedicto se mostraba perplejo por la presencia, entre los autores de la serie de libros, de un teólogo alemán muy crítico de San Juan Pablo II, de quien Ratzinger fue el brazo derecho durante más de una década.

“Sólo al margen quisiera anotar mi sorpresa por el hecho de que entre los autores figure también el profesor Hünermann (Peter), que durante mi pontificado saltó a la fama por haber liderado iniciativas anti papales”, escribió Benedicto. Joseph Ratzinger cerró su epístola así: “Estoy seguro de que tendrá comprensión por mi negativa y la saludo cordialmente.

La epístola completa fue difundida junto al siguiente comunicado de la Secretaría de Comunicaciones: “En ocasión de la presentación de la serie La teología de Papa Francisco, editada por la Libreria Editrice Vaticana, ocurrida el 12 de marzo pasado, ha sido revelada una carta del papa emérito, Benedicto XVI.

“Han seguido muchas polémicas acerca de una presunta manipulación censoria de la fotografía distribuida como acompañamiento fotográfico… De la carta, reservada, ha sido leído lo que se consideró oportuno y relativo a la iniciativa y en particular lo que el papa emérito afirma acerca de la formación filosófica y teológica del actual Pontífice y la unión interior entre los dos pontificados, dejando de lado algunas anotaciones relativas a colaboradores de la serie editorial.

“La decisión estuvo motivada por la reserva y no por intento alguno de censura. Para disipar cualquier duda, se ha decidido entonces dar a conocer la carta en forma completa”, se concluye.

La carta íntegra

Benedictus XVI

Papa Emeritus

Reverendísimo

Mons. Dario Edoardo Viganò

Prefecto de la Secretaría para la Comunicación

Ciudad del Vaticano

7 de febrero de 2018

Reverendísimo Monseñor

Le agradezco su cortés carta del 12 de enero y por regalo adjunto de los once pequeños volúmenes editados por Roberto Repole.

Aplaudo esta iniciativa que quiere oponerse y reaccionar contra el tonto prejuicio, según el cual el papa Francisco sería solamente un hombre práctico, privado de particular formación teológica o filosófica, mientras que yo habría sido únicamente un teórico de la teología que habría comprendido poco de la vida concreta de un cristiano actual.

Los pequeños volúmenes muestran, con razón, que el papa Francisco es un hombre de una profunda formación filosófica y teológica, y por eso ayudan a ver la continuidad interior entre los dos pontificados, aunque con todas las diferencias de estilo y de temperamento.

Sin embargo, no puedo escribir sobre ellos una breve y densa página teológica, porque en toda mi vida ha sido ciempre claro que he escrito y me he expresado solamente sobre libros que había leído verdaderamente. Lamentablemente, aunque sólo por razones físicas, no estoy en condiciones de leer los once opúsculos en un futuro próximo, por cuanto me esperan otros compromisos que ya he asumido.

Sólo al margen quisiera anotar mi sorpresa por el hecho de que entre los autores figura también el profesor Hünermann, que durante mi pontificado salió a la luz por haber encabezado iniciativas antipapales.

Él participó en forma relevante en el lanzamiento de la “Köiner Erklärung” (Declaración de Colonia), que en relación a la encíclica “Veritatis splendor” atacó en forma virulenta la autoridad magisterial del Papa, especialmente en cuestiones de teología moral.

También la “Europaische Theologengeselischaf” (Sociedad Alemana de Teólogos) que él fundó, inicialmente pensada por él como una organización en oposición al magisterio papal.

Posteriormente, el sentir eclesial de muchos teólogos impidió esta orientación, convirtiendo a esa organización en un instrumento normal de encuentro entre teólogos.

Estoy seguro de que me comprenderá por mi negativa y lo saludo cordialmente.

Suyo

Benedictus XVI