El Papa Francisco nombró como miembro de la Comisión Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano al cardenal polaco Stanisław Ryłko, de 73 años, arcipreste de la Basílica Papal de Santa María la Mayor, en Roma.
El papa Francisco es jefe de Estado de la Ciudad del Vaticano, en tanto la Comisión Pontificia es el cuerpo legislativo de la Ciudad del Vaticano. Está formado por el presidente de la Gobernación, quien es también presidente de la Comisión Pontificia y seis cardenales nombrados por el Papa para un periodo de 5 años.
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Además de su papel legislativo, el Presidente de la Gobernación del estado de la Ciudad del Vaticano, que desde el 1 de octubre de 2011 es el cardenal Giuseppe Bertello, ha sido delegado como una autoridad ejecutiva por el estado de la Ciudad del Vaticano por el Papa.
Lo acompaña como secretario general monseñor Fernando Vérgez Alzaga y como vicesecretario general el cardenal Giovanni Lajolo.
La Comisión Pontificia fue creada en 1939 por Pío XII. Desde 2011, los miembros de la Comisión Pontificia son los cardenales Giuseppe Bertello, presidente; Giovanni Battista Re, Jean-Louis Tauran, Antonio Maria Vegliò, Attilio Nicora, Leonardo Sandri, Domenico Calcagno, Beniamino Stella y ahora Stanisław Ryłko.
La carrera de Rylco
Ryłko actualmente es presidente emérito del Pontificio Consejo para los Laicos. El Papa Benedicto XVI lo nombró cardenal diácono del templo romano de Sacro Cuore di Cristo Re en la reunión del Colegio cardenalicio del 24 de noviembre de 2007.
Además de sus funciones principales, en 2008 fue nombrado por Benedicto XVI miembro de las congregaciones para las Causas de los Santos, para los Obispos y la Comisión Pontificia para Latinoamérica.
En agosto de 2010 Ryłko presidió la vigilia del sábado noche y la Eucaristía Final de la Peregrinación y Encuentro de Jóvenes (PEJ), que tuvo lugar entre el 5 y 8 de dicho mes en Santiago de Compostela con motivo del Año Santo Jacobeo.
Siendo presidente del Consejo Pontificio para los Laicos, pronunció el discurso de bienvenida, al concluir la misa de inauguración, en la 26 Jornada Mundial de la Juventud, celebrada en Madrid en 2011.
El 28 de diciembre de 2016 fue nombrado arcipreste y Administrador de la Basílica Papal de Santa María la Mayor.
Stanisław Ryłko nació en Andrychów en 1945. Se graduó en el Liceo de Maria Skłodowska-Curie en Andrychów en 1963 antes de entrar en el seminario de Cracovia; más tarde obtuvo su licenciatura en Teología Moral. Entonces, viajó a Roma para estudiar en la Pontificia Universidad Gregoriana, donde se doctoró en Ciencias Sociales.
Fue ordenado sacerdote por el cardenal Karol Wojtyła el 30 de marzo de 1969, en la Catedral de Wawel e hizo su trabajo pastoral en Poronin hasta 1971.
Fue el vicerrector del seminario de Cracovia hasta que se trasladó a la Academia Pontificia de Teología de Cracovia, donde enseñaba Teología práctica. Fue secretario del comité para el apostolado laico de la Conferencia Episcopal Polaca.
En 1987 volvió a Roma y se hizo cargo de la sección de juventud del Pontificio Consejo para los Laicos; durante este tiempo, organizó la Jornada Mundial de la Juventud de 1989 y la de 1991.
En 1992 fue trasladado a la sección polaca de la Secretaría de Estado de la Santa Sede.
El 20 de diciembre de 1995, Ryłko fue designado secretario del Pontificio Consejo para los Laicos y arzobispo titular de Novica por el papa Juan Pablo II. Recibió la Consagración Episcopal el 6 de enero de 1996 de Juan Pablo II, actuando como obispos auxiliares de la consagración el arzobispo Giovanni Re y Jorge Mejía, en la Basílica de San Pedro.
Como secretario, Ryłko era el segundo cargo del Pontificio Consejo para los Laicos, del que más tarde han estado a su cargo Eduardo Pironio y James Stafford.
El 4 de octubre de 2003, fue nombrado presidente del Pontificio Consejo para los Laicos.
Después de la muerte de Juan Pablo II el 2 de abril de 2005, Ryłko y el resto de la Curia Romana perdieron automáticamente sus cargos durante el periodo de sede vacante. Tras esto, el 21 de abril, después de la elección de Benedicto XVI como papa, volvió a ser nombrado por éste presidente del Pontificio Consejo para los Laicos.
