Al menos 21 personas han muerto y otras más se encuentran desaparecidas en Jordania durante las graves inundaciones producidas en las cercanías de la capital, Amán, durante la noche del 26 al 27 de octubre.

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La intensa lluvia arrastró un autobús de estudiantes en Jordania. Se trata de las peores inundaciones en años. Las fuertes lluvias y los vientos huracanados de hasta 100 kilómetros por hora han barrido toda la costa del Mar Muerto con consecuencias devastadoras.

En ese sentido el Papa Francisco ha querido solidarizarse y mostrar su cercanía a los familiares de las víctimas y a los demás afectados, y ha enviado un telegrama de condolencias al nuncio apostólico en el país.

En el telegrama, enviado por el Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, de parte del Papa expresa su “profunda tristeza al enterarse de la pérdida de vidas y de los heridos causados por las inundaciones producidas por las lluvias en Jordania”.

Bergoglio expresa su “solidaridad con todos los afectados por este desastre natural”. En particular, el Papa “reza por los jóvenes que han perdido la vida, la curación de los heridos y el consuelo de todos los que sufren”.

Asimismo, transmite su ánimo “a las autoridades civiles y a todos los implicados en las labores de rescate”. Sobre ellos, el Papa Francisco “invoca los dones divinos de fortaleza y paz”.