Duro golpe al secretario de Estado

El papa Francisco tomo una dura decisión histórica al quitar los fondos y todas las inversiones de la secretaría de Estado, con lo que ello implica; desde hoy, los recursos financieros de la secretaria que preside el cardenal Pietro Parolín deberán pasar a la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA).

La decisión papal había sido comunicada en una carta el pasado 25 de agosto al Cardenal Parolin; la otra señal fue cuando por primera vez la Secretaría de Estado no fue incluida en la Comisión de Cardenales del Instituto de Obras de la Religión (IOR), el denominado banco vaticano; y todo tiene que ver con los escándalos que se dieron a conocer por los medios italianos.

En efecto, el pasado 24 de septiembre fue destituido el cardenal italiano Angelo Becciu, quien fuera, entre 2011 y mediados de 2018, sustituto de la Secretaría de Estado: En el momento de su retiro era prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos; perdió también sus derechos cardenalicios, y aunque conserva el título de cardenal, ya no podrá participar de un eventual cónclave. Hay una investigación en curso.

La carta del papa Francisco a Parolin está escrita en italiano y explica que “la secretaría de Estado es sin lugar a duda el dicasterio que sostiene más de cerca y directamente la acción del Santo Padre en su misión, representando un punto de referencia esencial en la vida de la Curia y de los Dicasterios que forman parte de ella”. (Pero) No parece, sin embargo, necesario ni oportuno que la Secretaría de Estado desempeñe todas las funciones que están ya atribuidas a otros dicasterios. Por consiguiente, es preferible que el principio de subsidiariedad se aplique también en los asuntos económicos y financieros, sin perjuicio de la función específica de la Secretaría de Estado y la tarea indispensable que desempeña”.

Carta integra del papa Francisco a sus secretario de Estado (PDF)

La noticia y la carta se hizo oficial este jueves 5 de noviembre, después de una reunión presidida por el Papa en la tarde del miércoles 4, que ha definido que esta transición debe realizarse a través de una Comisión de Paso y Control.

Matteo Bruni, vocero papal, informó que en la reunión junto al cardenal Parolin, secretario de Estado, su sustituto, el venezolano Edgar Peña Parra, el secretario general del Governatorato, el español Fernando Vergez, el presidente del Apsa el obispo italiano Nunzio Galantino y el padre jesuita Antonio Guerrero Alves, prefecto de la Secretaría para la Economía, el papa Francisco decidió poner en acto este “traspaso de la gestión administrativa de los fondos de la Secretaría de Estado al Apsa y de su control a la Secretaría de Economía”.

“El objetivo de la reunión -agrega el comunicado-, era promover la aplicación de lo solicitado por el Santo Padre en la carta al Secretario de Estado, de fecha 25 de agosto de 2020.

En la misma reunión, el Papa constituyó la “Comisión de paso y control”, que entra en funcionamiento con efecto inmediato, para completar, en los próximos tres meses, las disposiciones de la carta al Secretario de Estado. Esta Comisión está integrada por Su Excelencia Monseñor Edgar Peña Parra, Sustituto de la Secretaría de Estado, Su Excelencia Monseñor  Nunzio Galantino, Presidente de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica y el Padre Juan Antonio Guerrero, Prefecto de la Secretaría de Economía.

Hay que decir, que decisión papal no afecta -de momento-, al Governatorato del Vaticano, a la Congregación para la Evangelización de los pueblos, que tienen autonomía en el presupuesto, propiedades y posibilidad de invertir o también a entes con autonomía presupuestaria como es el tribunal vaticano.

La decisión de Francisco es un golpe duro para la Secretaría de Estado que preside el cardenal “papable” Pietro Parolín, que pierde así un gran privilegio, ahora ya no dispondrá de fondos de ningún tipo -ni reservados, ni formados por el denominado Óbolo de San Pedro, que incluye donaciones de fieles de todo el mundo.

¡Francisco siempre nos sorprende!