Foto:Andreas Walker
Foto:Andreas Walker

Sospechoso de terrorista resultó ser bartender.

Atef Mathlouthi, ciudadano tunecino de 41 años, advirtió con demandar al diario italiano La Repubblica, luego de que en su edición digital difundió la versión de que era sospechoso de formar parte del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) y estaría listo para perpetrar un atentado terrorista en Roma durante la Semana Santa.

“Son todas falsedades las que han dicho sobre mí y no estoy en fuga. Trabajo en un bar para mandarle dinero a mi mujer (italiana) y a mis hijas. Desde 2012 no salgo de Túnez, estoy en Mahdia (localidad de la costa). Ayer me fui a trabajar y me encontré el bar rodeado por la policía, me dijeron que me buscan en Roma. Ojalá me llevaran allá”, declaró Mathlouthi a un programa de televisión italiano que se dedica a ubicar a personas.

De acuerdo con la versión de La Repubblica, la embajada de Italia en Túnez recibió una carta según la cual un ciudadano de ese país estaría listo para perpetrar un atentado en Roma durante estos días.

Ante ello, la inteligencia italiana analizó la versión, pues aún no había “nada seguro” y debían corroborar la autenticidad del escrito. Además, los carabinieros fueron puestos en estado de alerta máxima en prevención, por lo que se desplegó un gran operativo de vigilancia en los puntos más sensibles de la ciudad: edificios institucionales, áreas peatonales muy concurridas, centros comerciales, líneas del metro, estaciones de tren y hasta el aeropuerto.

Franco Gabrielli, jefe de la policía de Estado italiano, le dijo al Papa Francisco que la amenaza terrorista es latente, “pero los hombres y mujeres de la policía podrán contener” la situación.

Gabrielli lidera al equipo que se ocupa de la protección del pontífice durante sus visitas en territorio italiano y de la vigilancia de la Plaza de San Pedro.

La versión generó también un clima de psicosis. Elisabetta Piqué, periodista de La Nación señaló que “aunque hubo momentos de miedo este mediodía (lunes), resultó ser falsa la alarma de bomba que provocó el desalojo de La Rinascente, una gran tienda como El Corte Inglés, del centro de esta ciudad, durante algunas horas. La sede del diario romano Il Messaggero, que queda a cien metros de esta tienda de varios pisos, recibió un llamado que advertía ‘bomba en La Rinascente a las 15, Allahu Akbar (Dios es grande”.

Levantan la máxima alerta

Si bien la policía de Roma confirmó haber reforzado las medidas de seguridad, luego de la entrevista de Mathlouthi para el programa de televisión, descartó que el sujeto represente “un peligro concreto y actual”.

Contactado telefónicamente por el programa, Atef reprochó: “Hicieron asustar a mi mujer y a mis hijos”.

Beatrice, su esposa italiana, quien vive en Sicilia, contó que su marido vive y trabaja en Túnez para mantener a sus hijos y desde hace años no logra volver porque se le venció el permiso de residencia. “Uno de nuestros hijos se asustó mucho después de las noticias, no come y no quiso ir al colegio. La acusación contra mi marido es injusta”, lamentó.

Los rumores de atentados ocurrieron un día después de que el Papa Francisco recibió en la Sala Clementina a los policías de la Inspección de Seguridad Pública del Vaticano en la tradicional audiencia con motivo del comienzo de la Semana Santa.

En la reunión, el jefe de la corporación puntualizó que “los hombres y las mujeres de la Policía de Estado que se ocupan de su seguridad continuarán garantizándola, así como la de la Santa Sede y la de esta extraordinaria gran ciudad de Roma, sede de la cristiandad,señalada por la propaganda terrorista y yihadista como un símbolo a atacar”.