Foto:Basílica de Guadalupe (Comunicación Social)

La familia había pagado el rescate.

El cuerpo del sacerdote José Moisés Fabila Reyes, secuestrado el 3 de abril en Cuernavaca, Morelos, fue localizado el domingo pasado en un terreno baldío de la colonia Loma Sur, municipio Emiliano Zapata (a 12 kilómetros de la capital morelense), y permaneció como desconocido hasta que el miércoles 25 fue identificado por su familia.

Fabila Reyes, de 84 años de edad, pertenecía a la Basílica de Guadalupe y, pese a que su familia pagó el rescate, su cuerpo fue localizado en esa entidad. El presbítero se encontraba en Cuernavaca descansando por motivos de salud, pues padecía problemas cardiacos.

De acuerdo con los resultados de la necropsia realizada por las autoridades, la causa de muerte del sacerdote fue un infarto agudo al miocardio.

Según las investigaciones los plagiarios conocían los movimientos del cura y de su familia.

José Fabila Reyes es el quinto sacerdote asesinado en lo que va del año, por lo que existe una consternación de la Iglesia Católica.

Desde el pasado 3 de abril, la familia del sacerdote decidió no dar a conocer públicamente el plagio y mantener al margen de las negociaciones a la Arquidiócesis de México, las cuales, se conoció, comenzaron en dos millones de pesos.

El clérigo nació el 15 de diciembre de 1934, en Valle de Bravo, Estado de México, realizó sus estudios básicos en el Colegio San Juan Bosco, dirigido por sacerdotes y exseminaristas y con enseñanza y disciplina de preseminario. Siendo un niño aún, a los 12 años de edad, ingresó en el Seminario Conciliar de México; fue ordenado sacerdote por el cardenal Miguel Darío Miranda, en la Catedral de México, el 29 de junio de 1961.