Jesús Romero Colín. Foto: Twitter Cencos @cencos
Jesús Romero Colín. Foto: Twitter Cencos @cencos

Perdón es una palabra que no utiliza Jesús Romero Colín, una de las víctimas de abuso sexual del sacerdote Carlos López Valdez, quien falleció en prisión mientras cumplía una sentencia de 40 años por el delito de violación equiparable.

“No lo perdono, esa palabra está borrada de mi propio lenguaje que tiene un tono católico”, señaló Romero Colín. De la muerte de Carlos López comentó: “él trazó la ruta de su propia muerte por su manera de vivir. Tuvo oportunidad de redireccionar su camino y no lo hizo era soberbio y omnipotente”

Carlos López quien fue detenido en el 2016 en Jiutepec Morelos, desde el 2011 se le había retirado del ministerio fue sentenciado en marzo del 2018 a 63 años de prisión por el juzgado 55 en materia penal, pena que fue reducida a 40 años falleció el 5 de junio víctima del COVID-19.

En entrevista Jesús Romero afirmó que el fallecimiento del sacerdote pederasta no detendrá que éste continúe con su lucha por la justicia y demandará a los “obispos encubridores Jonás Guerrero y Marcelino Hernández” así como al cardenal Norberto Rivera Carrera, ante la Santa Sede.

En entrevista Jesús Romero afirmó que su caso aún no está cerrado porque hay pendientes de la recomendación que envió la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México a la Fiscalía como los señalamientos en contra de los ministerios públicos por dilatar nueve años su caso.

Las denuncias por encubrimiento contra los jerarcas católicos que pertenecían a la Arquidiócesis de México, confío Romero Colín serían presentadas al arzobispo Charles Scicluna de la Congregación para la Doctrina de la Fe que visitaría México en marzo de este año para reunirse con víctimas de abuso sexual pero ésta se canceló por la pandemia del COVID-19.

Actualmente Jesús es psicólogo y en la entrevista comentó no confiar en las autoridades eclesiásticas mexicanas por eso busca una vía directa en el Vaticano para presentar su denuncia.

Del Equipo Interdisciplinario de Atención a Víctimas de la Arquidiócesis de México creado para atender a víctimas comentó haberse reunido con sus integrantes en varias ocasiones pero “al final esa institución que ahora preside el cardenal Carlos Aguiar es la misma que encubrió al sacerdote Carlos López”.

Actualmente Jesús Romero preside una organización de atención a víctimas de abuso sexual y considera que el cardenal Norberto Rivera también tuvo la oportunidad de corregir al conocer los actos del sacerdote Carlos López y tampoco lo hizo.