La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) informó que 48 por ciento del donativo de medio millón de dólares enviado por el Papa Francisco para ayudar a los migrantes que se encuentran en el país será canalizado a 13 proyectos presentados por las diócesis.

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Además, consideró que las autoridades mexicanas han sido rebasadas para brindar atención a los indocumentados que llegan en las caravanas provenientes de Centroamérica.

El arzobispo Rogelio Cabrera López y el obispo Alfonso Miranda, presidente y secretario general de la CEM, consideraron que la grave crisis humanitaria de los migrantes continúa y son numerosas las caravanas que han ingresado a nuestro país.

Solo en febrero sumaban más de 75 mil personas y en marzo 100 mil, según reportes de autoridades de Estados Unidos, que es la cifra de detenidos en la frontera con México.

Ante esta problemática, la CEM llamó a los gobiernos de ambos países a acoger e integrar a los miles de migrantes que ya están en nuestro país, a los medios de comunicación a dar cobertura objetiva y justa ante las caravanas que siguen llegando, y a los ciudadanos a mirar con caridad al migrante que sufre y apoyarlo.

El Episcopado señaló que algunos migrantes son acogidos en albergues atendidos principalmente por agentes de pastoral de la Iglesia Católica, pero también por numerosos organismos de la sociedad civil y de otras Iglesias, ofreciéndoles, tanto como ha sido posible, ayuda humanitaria, moral y espiritual.

Sin embargo, en los últimos meses se ha anunciado la llegada de nuevas caravanas, por lo que la crisis humanitaria seguirá en aumento.

La CEM también advirtió que en las fronteras norte y sur los albergues se encuentran sobrepoblados y entre los habitantes de los pueblos y ciudades donde se ubican se han empezado a suscitar fuertes inquietudes ante campañas informales que “criminalizan” al migrante e impiden que éstos puedan obtener un trabajo, rentar un departamento o circular tranquilamente por las calles.

Las redes de albergues de las diferentes diócesis y congregaciones religiosas, así como de organismos civiles, son las que especialmente atienden a miles de indocumentados, mientras “las autoridades, en muchos lugares, no se dan abasto y se ven muy rebasadas en cuanto a la ayuda y trato digno que merecen las personas migrantes”, consideró la CEM.

Para atender esta situación, los obispos consideraron necesario que exista una mayor vinculación entre la estructura de la Iglesia Católica y el gobierno en todas sus instancias, “cosa que lamentablemente no se ha dado en la medida deseada y esperada ante una emergencia de esta naturaleza”.

Otros 14 proyectos recibirán los recursos

Además, los obispos recordaron que en febrero la Dimensión de Movilidad Humana y la secretaría general de la CEM organizaron un encuentro nacional con responsables de las casas de migrantes, donde se expusieron las principales necesidades que se tienen en los albergues.

Posteriormente se les convocó a elaborar proyectos para la atención a los migrantes en medio de la emergencia detonada, de manera que el donativo recibido del Papa Francisco se aplicará a la atención de las necesidades de los migrantes.

Se recibieron 27 solicitudes de 16 diócesis del país, de las cuales 13 proyectos han sido aprobados. El recurso ya asignado corresponde a 48 por ciento del donativo papal, los recursos están en proceso de entrega y se busca que ésta sea transparente. Además, hay otros 14 proyectos que están en análisis y verificación.

El dinero del donativo proviene del Óbolo de San Pedro, institución que administra la ayuda económica que envían los fieles de todo el mundo al Pontífice.

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