El patriarca Irineo I, máximo líder espiritual de la Iglesia Ortodoxa serbia, murió el pasado viernes 20 de noviembre en Belgrado después de contraer el Covid 19; todas las campanas serbias doblaron en señal de luto.

El líder religioso tenía 90 años, y murió tres semanas después de haber oficiado el funeral con ataúd abierto del clérigo principal de la iglesia en Montenegro, Amfilohije Radović; tres días después fue hospitalizado.

Numerosos fieles acudieron al Templo de San Sava en Belgrado para despedir a su líder espiritual. El cadáver estuvo expuesto desde el sábado en la catedral, esta vez en un féretro cubierto con cristal y no abierto como suele ser en los ritos ortodoxos, para que los ciudadanos que rendían homenaje al jerarca no pudiesen acercarse para besarle las manos; aun así, los fieles besaron el cristal que cubría el cuerpo, el quid es que muchos de ellos no llevaban tapabocas ni guardaron la sana distancia.

Pero es imposible prohibir funerales de este tipo, ya que la Iglesia Ortodoxa Serbia ejerce una gran influencia política en el país balcánico.

La liturgia fue oficiada por los obispos de la Iglesia serbia, acompañados por delegados de las comunidades religiosas católica, musulmana y otras, los máximos representantes políticos serbios y otras personalidades.

Irineo I es el primer patriarca enterrado en la cripta de la iglesia de San Sava en Belgrado, uno de los mayores templos ortodoxos del mundo.

El presidente serbio, Aleksandar Vučić, se despidió del líder religioso a través de su cuenta de Twitter: “Nuestro pueblo serbio tiene grandes patriarcas y personas, y el patriarca Irineo I fue uno de ellos. Como exigió este tiempo y como quiso nuestra gente. Que Dios perdone su alma y le dé un asentamiento paradisíaco”.

“El amor fue la base de la fe del difunto Patriarca Irinej, y su Serbia fue la que él mismo creó: una Serbia de paz, una Serbia que comprende y reúne, que gana con trabajo y sabiduría, una Serbia que no puede y no necesita odiar”

En tanto, el presidente ruso Vladimir  Putin envió sus condolencias al presidente de Serbia .”Le pido que transmita mis palabras de sincero pésame a todo el hermano pueblo serbio.

La Santa Sede envió sus condolencias: “El Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos ha conocido con profunda tristeza la noticia de la muerte de Su Santidad Irineo. A lo largo de su ministerio, Su Santidad fue un ejemplo de fe y diálogo, humilde y alegre, dedicando su vida totalmente a Dios y alentando el espíritu de comunión dentro de la Iglesia Ortodoxa Serbia”, se lee en una carta oficial. 

El Cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo, envió la carta de pésame al metropolitano Chrizostomo, Arzobispo de Sarajevo, quien lidera temporalmente el trono patriarcal. El Purpurado recordó con gratitud sus encuentros con el Patriarca y su hospitalidad.

El arzobispo católico de Belgrado, Mons. Stanislav Hocevar, también envió un mensaje de condolencias, y muchos mas.

¿Quien fue Ireneo I?

Irineo sucedió al Patriarca Pavle el 22 de enero de 2010

Su nombre mundano fue Miroslav Gavrilovic, nació en 1930 en el pueblo de Vidovo, cerca de Cacak -Serbia central- como , se convirtió en monje en 1959 y en 1975 fue elegido obispo de Nis, donde sirvió durante 34 años antes de ser investido como Patriarca número 45 en la catedral de Belgrado, y al mismo tiempo arzobispo de Peć (sede del monasterio patriarcal), Metropolita de Belgrado y Karlovci, y Patriarca de los serbios.

La Iglesia ortodoxa serbia es autocéfala y miembro de la comunión ortodoxa.

La Iglesia ortodoxa serbia posee muchas reliquias importantes cristianas, como la mano derecha de Juan Bautista, partes del cráneo y la mano de San Jorge, 4​ segmentos de la Santa Cruz, el dedo de Santa Paraskevi y el cuerpo de San Basilio de Ostrog, entre otros.

La Iglesia cuenta con alrededor de 12 millones de fieles, en su mayoría en Serbia, Montenegro y Bosnia, pero también tiene diócesis en Europa Occidental, EU y Australia.

Irineo siempre destacó su alejamiento de la política, aunque sus valores estaban en consonancia con las formaciones conservadoras.