El nuncio apostólico, Franco Coppola durante su participación en la 107 Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM)
El nuncio apostólico, Franco Coppola durante su participación en la 107 Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM)

El nuncio apostólico, Franco Coppola, afirmó ante los obispos mexicanos que en los seminarios falta aún mucho por hacer en la formación pastoral, porque “no se trata de formar administradores, sino de formar padres, hermanos, compañeros de camino”, y propuso una reforma a la catequesis que podría ser escolarizada.

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Durante su participación en la 107 Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) sobre la formación en los seminarios, señaló que “nunca debemos cansarnos de repetir, hasta convencernos, cuánto es necesario que los seminarios cuenten con los más idóneos formadores, cosa que no siempre sucede. Tienen que ser verdaderos mentores, acompañadores, modelos y guías. ¡Un grado de especialización en Teología a nadie convierte automáticamente en persona apta e idónea para tan trascendental ministerio!”

En este sentido, recordó las palabras del Papa Francisco refiriéndose a la formación sacerdotal: “Los seminarios deben convertirse en verdaderas comunidades de formación; con formadores capaces de acompañar realmente de cerca a las personas”.

El nuncio reconoció que en sus encuentros con los sacerdotes y los formadores de seminario ha constatado “el cuidado creciente que se pone en el área de la formación académica y humana; en cambio, en la formación espiritual (que no se puede reducir a la pura formación litúrgica) y en la formación pastoral me parece que falta aún mucho por hacer… En una palabra, me parece que nuestros presbíteros carecen de una real formación a la paternidad…”

Agregó: “Cuando escucho de día libre semanal, en el que ni siquiera se celebra la Misa; cuando escucho de vacaciones, cuando escucho de horario para atender a los feligreses, me pregunto: ¿acaso los padres tienen un día libre por semana? ¿Hacen vacaciones sin sus hijos? ¿Tienen horario de atención para ellos? Sin darnos cuenta estamos transformando nuestra misión de padres, como nos lo recuerda nuestro pueblo, en una profesión…”

El nuncio Coppola expuso que la formación de los futuros sacerdotes es una obra de arte, por eso cuestionó “si no sería hora de examinar la conveniencia de reunir los seminarios diocesanos en seminarios provinciales, en modo de asegurar, con capacitados formadores y medios idóneos, una formación de mucha mayor calidad”.

También convocó a una reforma en la catequesis, la cual representa un desafío en todas las diócesis y sus parroquias. Dijo que ésta debería procurarse que sea “escolarizada”, es decir, una catequesis que acompaña al niño y al adolescente durante todos los años de primaria, secundaria y preparatoria.

Debe ser “experiencial, no un adoctrinamiento o una simple enseñanza de conocimientos, sino más bien un acompañamiento en el hacer experiencia de Dios. En este sector también, puede ser muy útil el acercamiento a los movimientos y a los religiosos, por lo menos con los que ya tienen un contacto fuerte y constante con los jóvenes…”