El arzobispo emérito de Sydney, George Pell, escribió una carta en la que agradeció a sus simpatizantes por sus oraciones y expresó su preocupación por los preparativos del próximo Sínodo de los Obispos para la Región Panamazónica.

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“Amazónico o no amazónico, en todos los países la Iglesia no puede permitir que ninguna confusión, y mucho menos cualquier enseñanza contraria, dañe la Tradición Apostólica”, escribió en una carta manuscrita de dos páginas.

En la misiva, firmada el 1 de agosto en la cárcel de evaluación de Melbourne, el Cardenal indiciado también señaló que puede sobrellevar su encarcelamiento gracias a su fe y por las oraciones de los fieles, y que está ofreciendo su sufrimiento por el bien de Iglesia.

“El conocimiento de que mi pequeño sufrimiento puede usarse para buenos propósitos al unirme al sufrimiento de Jesús me da un propósito y una dirección. Los desafíos y problemas en la vida de la Iglesia deben enfrentarse con un espíritu de fe similar”, escribió.

El Purpurado también manifestó que “tenemos motivos para estar perturbados por el instrumentum laboris del sínodo amazónico”, que se publicó en junio de cara a la reunión de octubre.

Sigue su juicio

Tras su condena en diciembre del año pasado por la Corte del Condado de Victoria por cinco cargos de abuso sexual infantil, Pell fue sentenciado en marzo de 2019 a seis años de prisión, de los cuales debe cumplir al menos tres años y ocho meses.

El veredicto fue inmediatamente apelado por el equipo legal del cardenal Pell y este ha permanecido en prisión desde entonces.

Se espera una decisión de su caso en menos de un mes.

En la carta, Pell dijo haber recibido entre mil 500 y 2 mil mensajes de apoyo durante su tiempo en prisión y que tiene la intención de responder todos.

Las oraciones y cartas de los fieles, dijo, “traen inmenso consuelo, humana y espiritualmente. Mi fe en el Señor, como la de ustedes, es una fuente de fortaleza”, concluyó.

Silencio en el Vaticano

Desde que se anunció la condena del purpurado, la Santa Sede ha evitado pronunciarse públicamente sobre la resolución del caso, aunque ha recordado el derecho del prelado a defenderse.

“Esperamos ahora el resultado del recurso de apelación, recordando que Pell ha reiterado su inocencia y tiene el derecho a defenderse hasta la última instancia”, indicó Alessandro Gisotti, entonces director interino de la Oficina de Prensa de la Santa Sede en una declaración el 26 de febrero de este año.

Dos días antes, Pell dejó de ser prefecto de la Secretaría de Economía del Vaticano; el golpe fue duro para el Papa Francisco.

Esperemos el veredicto.

Si es inocente no sabemos qué decidirá el Papa; Pell era un hombre clave en la Curia vaticana.